Testimonios:

Hola amigos mañana hará dos años que me dieron el alta En Riera Mayor contento porque sigo en abstinencia y toda la maquinaria personal funciona perfectamente, familiar, profesional pero sobre todo emocional.
Y con muchas ganas de seguir adelante. Aprovecho la ocasión para animaros a seguir adelante cueste lo que cueste y si recaéis aprovechar lo ya aprendido para salir más reforzados. Un saludo muy especial a la plana mayor de Riera no os olvido siempre en mi corazón os quiero y hasta pronto.

El primer factor en que me ha ayudado el taller sociolaboral en abandonar el alcohol ha sido la disciplina. Por una elemental norma de convivencia y respeto hacia los demás hay que acudir sobrio. Allí he aprendido que soy más, mucho más que un ser atado a una botella, que podemos convivir con nuestros semejantes y que somos capaces de crear belleza mediante nuestras pequeñas y personales obras de arte.

En el Taller Sociolaboral estoy aprendiendo a controlar la impulsividad, a ser más útil, aprendiendo habilidades que yo no pensaba que tuviera, despertándome de un mal sueño que es el alcoholismo. Cada día cuando me levanto y voy al taller es una nueva oportunidad de ser una Irene mejor, más capaz de convivir feliz conmigo misma.

Gracias por la paciencia, gracias por creer en mí, gracias por guiarse. Gracias por darme las herramientas que me han permitido volver a soñar, y luchar por hacer mi sueño realidad. Ahora me siento capaz. Capaz de reinventarme, capaz de ser yo mismo y sobre todo capaz de ser feliz. El camino no es fácil pero nos permite crecer enormemente, darnos cuenta de quiénes somos y sentirnos afortunados de ser así. Que tengamos suerte.

Mi paso por el Centro Terapéutico «Riera Major» ha sido la mejor decisión que he tomado en mi vida. Sí, la vida, porque a mí me daba igual todo y gracias a ellos he vuelto a nacer y ahora tengo ganas de vivir de verdad. Actualmente estoy en piso terapéutico y estoy muy bien gracias a ellos que me ayudan cuando tengo malos momentos. Para la abstinencia tener una rutina a mí me va bien. Además, el taller sociolaboral y es una de las cosas que va muy bien para continuar con ganas de hacer cosas, te das cuenta que no eres un inútil, que puedes hacer cosas muy bonitas y te sube la autoestima. A mí me funciona, estoy muy contento gracias a todos por devolverme las ganas de vivir.

Hoy 25 de Febrero asisto por primera vez a la reunión de ex-usuarios del Centro Terapéutico «Riera Major», ha sido muy emocionante verlos a todos otra vez, los recuerdos han vuelto a mí, pensaba de cuando estuve aquí, me hace valorar lo que he conseguido y me hace sentir muy orgullosa de mí misma.

Hola. Me llamo Daniel Mora y digo mi nombre porque me siento orgulloso del paso tan importante que estoy dando.
Digo que estoy dando porque esto no acaba cuando te dan el alta, es una enfermedad mental crónica por lo tanto debemos estar atentos a nuestro estado de ánimo y a nuestro pensamiento.
Mi paso por el Centro Terapéutico «Riera Major» ha sido un punto inflexión en mi vida, la verdad es que después de pasar por varios procesos, en el Centro Terapéutico «Riera Major» me enseñaron el qué y porqué de nuestra enfermedad, cómo funciona y cómo actúa, en fin estoy muy agradecido a todo el equipo de Fundación por entender, respetar tanto la enfermedad.
Solo digo que el que tenga problemas de adicciones y esa persona lo sabe, solo lo solucionará cuando dé el paso y acepte que tiene un problema y quiera hacer el proceso con honestidad.

Hola compañeros soy Greta Gil. Estuve ingresada en el Centro Riera Major en el programa de Atención en Crisis y me fue muy bien estar 6 semanas de programa porque me ayudó a tranquilizarme y a reflexionar. Os recomiendo de vez en cuando una escapada en el bosque, en la naturaleza, si vivís en la ciudad os irá bien para parar la recaída.

Mucho ánimo! Greta.

Pronto hará un año de mi ingreso en el Centro Riera Major y todavía recuerdo el día de entrada, el fatídico día en aquellos momentos. Hubiera dado lo poco que me quedaba tanto material como personal para dar media vuelta.
Gracias a Dios y a la familia que me empujaron a hacer lo correcto me quedé y quizás ha sido la mejor decisión que he tenido en mis 54 años.
Cualquier cosa desconocida te da respeto al principio pero a las pocos días ya empiezas a darte cuenta de donde estas, a que has venido y lo que puedes lograr si te lo propones.
A nivel terapéutico quizás lo más importante lo aprendido es impagable ya que al trasladarlo a la vida normal te dan armas suficientes para luchar contra la maldita adicción.
El que tanto profesional como personal de educadores, terapeutas y demás trabajadores del centro te hacen más llevadero la estancia.
No os lo penséis, dar un paso hacia adelante y no es otro que ingresar para salir de este mundo oscuro en el que vive. Ellos te ayudaran.

En el SAP me he sentido tratada con respeto y comprensión y me han ayudado a quitarme el sentimiento de culpa que tenia por haber consumido alcohol tantos años.
Muchas gracias!!