Centro de Día «Crisàlide»

Crisàlide es un Centro de Día para personas inmersas en un proceso de deshabituación de adicciones. En activo desde 1991, desarrolla actividades terapéuticas, ocupacionales y educativas que facilitan la superación de la drogodependencia y la reinserción sociolaboral.

El propósito principal es complementar el tratamiento ambulatorio mediante la creación de rutinas y el despliegue de talleres terapéuticos, educativos y ocupacionales. Estas propuestas buscan aumentar la capacidad de afrontamiento y resolución de problemas sin recurrir al consumo, elevar la tolerancia a la frustración y fortalecer autoestima, paciencia y constancia. Todo ello en un entorno seguro e inclusivo que, además del trabajo personal, impulsa las habilidades sociales y prepara para el retorno activo a la vida comunitaria.

Ubicado en Barcelona y conducido por un equipo profesional con amplia experiencia, el centro ofrece a diario actividades para mantener la abstinencia, prevenir la marginación y la exclusión social y fomentar hábitos saludables y relaciones positivas. La terapia ocupacional mediante marquetería, arteterapia, espacio de relajación, taller de huerto, prevención de recaídas o gestión del tiempo libre forma parte del programa, junto con salidas culturales.

Actualmente, el recurso está financiado por el Departament de Treball, Afers Socials i Famílies de la Generalitat de Catalunya, con la complementación de algunas cuotas de personas usuarias.

Programa terapéutico

Se trata de un espacio terapéutico para quienes realizan tratamiento ambulatorio de deshabituación al alcohol, otras drogas o adicciones comportamentales. A la vez, es un espacio educativo donde se potencian las capacidades de afrontamiento, la resolución de problemas y el aprendizaje en la gestión emocional.

El trabajo se articula a través de diversas actividades y de una dinámica de relación con el equipo y el grupo, orientada a alcanzar metas terapéuticas. Las propuestas buscan modificar de forma significativa la manera de enfrentar el día a día.

Los objetivos centrales son consolidar la abstinencia, reforzar la autoestima, desarrollar habilidades personales y sociales y recuperar hábitos prelaborales cuando corresponda. Junto al soporte terapéutico y afectivo del equipo, esto favorece la integración participativa, activa y emocional en el entorno personal y social.

El centro realiza un seguimiento diario de la evolución, lo que permite la detección precoz de recaídas y su rápida intervención. A su vez, las coordinaciones periódicas con los recursos derivadores garantizan un abordaje integral y una atención individualizada. La duración de la estancia es variable y se ajusta a las necesidades y a la evolución de cada persona.